El cuerpo ideal de los hombres gay: la travesía del clóset al gym
El restaurante había estado particularmente lleno esa noche y yo moría de hambre. En ese entonces, para pagar mi posgrado, trabajaba como mesero en un restaurantito en el que en son de broma decíamos: “para que te contraten tienes que ser un poco curioso”. A medida que el ritmo se…